Redes sociales, transparencia, grupos de interés, huella social, empleados, personalización… ingredientes de la reputación en 2020
El mes pasado ya dedicamos un post a la gestión de intangibles, y hoy publicamos una nueva entrada sobre la gestión de la reputación tras la lectura de Reputation 2020 de Reputation Institute. Es un informe de fácil lectura y con una estructura ágil que se centra en las 10 tendencias que conducirán la gestión de la reputación hasta 2020:
- Saber quién eres y atenerse a ello
- La revolución del Big Data tendrá consecuencias
- La gestión de la reputación es un viaje de largo recorrido
- El Director/a de Comunicación liderará la gestión de la reputación en 2020
- Los trabajadores serán los embajadores de la marca
- La gestión de la reputación aumentará el valor de la empresa
- Los grupos de interés aumentarán en número e influencia
- Personalizar el mensaje será la norma
- La reputación del sector afectará directamente a la reputación de cada empresa
- La relevancia social ayudará a las empresas a destacar
Por nuestro trabajo en el día a día, empezaremos por la última tendencia y también porque, según la publicación, el principal driver para la reputación en 2020 será el grado en que una empresa pueda mostrar su impacto social. Esta relevancia social puede derivarse de la naturaleza del negocio o también del valor que los grupos de interés perciben en los productos y servicios. Este valor no depende de lo que el producto o servicio hace sino de lo que hace por los individuos y por la sociedad.
Todas las empresas y sectores necesitan hablar más sobre lo que hacen por la sociedad y deberían expresar de manera proactiva el valor que la empresa crea para la sociedad incluyendo los empleados creados, los ingresos repartidos y otros beneficios sociales.
También nos queremos detener en la tendencia que se refiere a los empleados como mejores embajadores de la empresa, tendencia que también destacamos en un post anterior. Además, el papel de los profesionales como embajadores tiene una doble perspectiva: la de los clientes y la de atraer a nuevos profesionales valiosos, necesidad que se incrementará por la pelea por el talento que se desencadenará como consecuencia del cambio demográfico.
El papel del empleado como embajador de la empresa es una frase hecha pero para que se haga realidad se requiere que haya una coincidencia entre los valores de los empleados y los de la empresa, y también un cambio en la mentalidad de cómo se gestiona a las personas en las empresas. Este cambio se deriva de que algunos trabajadores no buscan un empleo sino una empresa que coincida con sus valores personales.
Otra tendencia a la que dedicamos unas líneas es la que se refiere al aumento del número e influencia de los grupos de interés. Esta tendencia también es destacada por el estudio editado por PwC, Business through a new lens, donde el 84% de los CEO entrevistados espera mayores exigencias de los grupos de interés. Esta mayor importancia se deriva tanto del potencial de las redes sociales como del hecho de que los grupos de interés ya no solo actúan de manera individual sino que también empiezan a colaborar entre ellos para generar cambios en las empresas. El estudio espera que en 2020 sean comunes estas colaboraciones.
Esta realidad, cada vez más compleja, requiere una actitud proactiva de las empresas y un mayor esfuerzo por identificar qué grupos de interés serán relevantes en el futuro y por entender qué redes y dinámicas se establecen entre los diferentes grupos de interés.
Dos comentarios finales sobre un par de tendencias fundamentales. Las claves para gestionar primera tendencia, Saber quién eres y atenerse a ello, son la autenticidad y transparencia y, a veces, se olvida en el día a día. No olvidar la octava tendencia, personalizar el mensaje, es una necesidad para llegar al destinatario. No vale pensar que con la memoria de RSC nuestros grupos de interés ya están informados.